Día 13: Un día en el Lago di Garda.

7 de Octubre de 2011

El visitar el Lago di Garda en nuestro viaje surgió casi por casualidad. Queríamos dedicar esta última jornada antes de emprender el camino de vuelta a pasar un día tranquilo, en algún lugar en el que pudiésemos disfrutar de la naturaleza, pero sin que el día se convirtiese en una sucesión de visitas a pueblos y monumentos. La idea era pasear, disfrutar del entorno, descansar y reponer fuerzas para emprender el camino de vuelta.

El Lago di Garda

Al principio pensamos en pasar el día en el Lago di Como, en alojarnos en Bellagio y quizás visitar Varenna, pero al final desechamos la idea pues nos teníamos que desviar mucho del recorrido inicial. Fue entonces cuando descubrí que el Lago di Garda estaba justo en nuestro camino de vuelta, entre las localidades de Bérgamo y Verona, y a algo mas de hora y media de Venecia.

Ese día dejamos Venecia mientras llovía a mares en la ciudad, fue la única mañana de mal tiempo que tuvimos durante el viaje, pero nos ayudó a que nuestra despedida de la ciudad de los canales fuese algo menos triste de lo esperado. 

El Lago di Garda

Poco tiempo después llegábamos a un Sirmione en el que aún lucía el Sol. Nos instalamos en nuestro hotel y desde su precioso embarcadero vimos por primera vez el mayor lago de Italia, el Lago di Garda. Me pareció un lugar precioso para pasar unas vacaciones de relax o en familia.

Vistas desde el embarcadero del hotel

Y es entonces cuando empecé a pensar en lo bonito que sería recorrer el lago en barco, y recordé los comentarios que había leído en los que se hablaba de los barcos que cruzaban el Lago di Como desde Como a Bellagio, o desde éste a Varenna, pero aquí no se divisaba ninguno así que pensé que sería imposible hacerlo realidad.

Fue entonces cuando mientras paseábamos por Sirmione nos encontramos a un hombre que alquilaba su lancha para dar paseos por el lago. Nos costó 40 € el viaje para los dos, con el barco para nosotros solos, pero merecieron la pena hasta el último céntimo.

Paseo en barco por el lago

Fue una experiencia que me encantó, en un viaje de unos cuarenta minutos navegamos hasta el interior del lago, bordeamos la península de Sirmione, y volvimos al punto inicial pasando por debajo del puente levadizo y del canal que rodea el castillo. Las tarifas para grupos o familias salían mas económicas, 10 € por persona.

Sirmione desde el barco

Vistas desde el paseo en barco
Y desde el barco durante el paseo también divisamos las ruinas arqueológicas de Sirmione, las Cuevas de Cátulo.

Cuevas de Cátulo

El resto de la tarde lo pasamos visitando el castillo de Sirmione, la Roca Scaligera, paseando por el pueblo, haciendo algunas compras y disfrutando de las preciosas vistas del lugar.  El castillo está situado al final de la península que forma la localidad de Sirmione y se encuentra rodeado completamente por agua.

Castillo de Sirmione

Hay otros muchos lugares que visitar en el Lago di Garda, los pueblos Lazise, Bardolino o Peschiera del Garda entre otros, son lugares también muy recomendados en una ruta bordeando el lago, aunque nosotros no los visitamos. El ambiente que encontramos al llegar a Sirmione y el ser ya el final de nuestro viaje hicieron que prefiriésemos pasear sin prisas por el pueblo y disfrutar del lago desde allí.

Al día siguiente comenzaríamos el viaje de regreso a casa haciendo una breve parada en Mónaco, una ciudad que nos dijo más bien poco y en la que dimos un corto paseo, buscamos el circuito de Fórmula 1 y visitamos el Casino.  Pasamos esa noche en un hotel de la Cadena Campanile en Montpellier y unos cientos de kilómetros más tarde llegamos a casa después de 15 días de viaje que no olvidaremos nunca por la preciosa Italia.



  
   
        
        Puedes colaborar enriqueciendo el blog dejándonos un comentario con tus dudas, consejos, aportaciones o sugerencias. Te leemos! ⬇⬇